20 septiembre, 2011

Flotando

yo me imagino que la sacudida te deja un rato flotando. entonces el mundo, la gente, sus relojes, las voces y los programas de televisión siguen pasando. pero una está inmóvil, encima de eso. y todo se mueve cronométricamente, a un ritmo que no entiendo ni adentro ni afuera.

luego una cae. la fila del bus avanza, paga el pasaje y se sienta. pasa por las mismas calles, dura un par de minutos más por la presa.

la vida sigue, y una va con ella.

2 comentarios:

Narcissa dijo...

Eso -justo así- sucedió nosécuándo a las noséqué del día (sí, en plena luz del día!) y yo misma me decía que una de dos: o había atravesado por un vórtice momentáneamente a otra dimensión, o eso de la relatividad es cierto.

Abraxo!

Sirena dijo...

:-S