01 diciembre, 2010

de si lu sión me ha venido a ver

No tengo idea por qué no me dolés en las piernas, en los brazos, en la punta de los dedos... me dolés en el pecho, en el centro; mitad al frente, mitad en la espalda. Yo hoy quiero que alguien me explique por qué los dolores del alma se sienten en el cuerpo, por qué me encorvo hacia adelante al llorar por vos; como cuando duele el estómago y una se sostiene fuerte, se inclina como tratando de no estirarlo... a veces resulta, el estómago duele menos; el alma me sigue doliendo igual.

Hace días pensaba que seguro le tengo miedo a las alturas, no a las físicas, a las emocionales. Me daba miedo irme muy alto, dejar que tanta cosa tuya me levantara de esa manera... es que entre más alto, más larga y fuerte es la caída. No, no hay rush de serotonina que haga que valga la pena la forma en que me siento ahora... por vos he tenido las emociones más intensas de los últimos meses, ahora quiero que desaparezcan.

2 comentarios:

MY dijo...

wow! me llegó... snif

Ana dijo...

abrazo


pd. cuando me acuerdo cómo me sentía ese día, me vuelve la presión en el pecho