16 noviembre, 2007

Habrá vacante

No precisamente dejaste una vacante, es más bien que saliste un día y decidiste no regresar.

Ahora tengo un espacio lleno de todo pero vacío de vos.

Tendré entonces que desalojarte, sacar tus cosas a la calle y limpiar los rincones impregnados de tus caricias.

Pintar de colores las paredes y poner cortinas nuevas, cambiar los muebles de lugar.

Y si me sobra un día entre tantos números y diseños podría abrir las ventanas, dejar que entre aire nuevo y al final del día cerrar la puerta esperando que venga alguien a ese hermoso espacio nuevo.



El canto que sirvió de inspiración

2 comentarios:

pezenseco dijo...

renovar, renovar... pinturas, cortinas, puertas, pañuelos, colores, platos, vestidos, a veces también amantes o amados, señal de uno sigue vivo. Saludos, Ana.

Damián Arroyo dijo...

creo que ya entendí :(